jueves, 30 de junio de 2011

El poderío de las multitudes

La foto que @_js_01 (Jaime Sepúlveda) subió a Twitter: Estudiantes en Talca
¡Cuánto remueven las movilizaciones masivas!
La de este jueves 30 de junio, en Santiago y en muchas otras ciudades de norte a sur del país, fue de verdad impresionante. Una convocatoria con muy pocos precedentes y llena de significados.
Muchos dirigentes pusieron el énfasis en el respaldo de la ciudadanía entera a la causa de los estudiantes. Puede haber una parte de verdad en eso, pero también hay una parte discutible. "La ciudadanía entera" es mucho decir. Vale la pena recordar que quienes se movilizan pueden ser enormes multitudes, pero no son necesariamente las mayorías. Sólo podremos saber qué piensa la ciudadanía entera en las próximas elecciones. Y aun así siempre nos quedará la duda sobre qué piensan los que no votan.
Pero nada de eso quita valor y relevancia a la gigantesca convocatoria de este jueves. Hay una señal potente allí, y para bien del país puede concluirse que una buena porción de la generación joven de hoy está muy lejos de la tan mentada apatía y egoísmo que por tantos años se le atribuyó.

Lo más conmovedor de las marchas del 30 de junio es haber constatado de nuevo la posibilidad de que mucha gente invada el espacio público abrumadora, pero pacíficamente. Claro que se altera la marcha de las ciudades. Se perturba la vida de cientos de miles de otros ciudadanos, y a veces de manera ingrata. Pero el beneficio de abrir espacios a la manifestación libre de todos los que quieran expresarse, donde hay un componente de conciencia social, de reconocimiento del otro, de "compartir mi metro cuadrado", de inspiración altruista, de alegría colectiva, de creatividad en el mensaje... todo eso es impagable. Bien vale la alteración de la vida.


Hasta allí, es incluso admisible la restricción parcial de ciertos derechos de los que no participan en las manifestaciones. Las libertades tienen sus costos. Peor sería no tenerlas y no ejercerlas. Y sería peor también para los que no están movilizados hoy, por estas causas.
El límite está un poco más allá: en la abierta violación de los derechos de otros. En la violencia contra personas y contra bienes materiales que nos pertenecen a todos o que pertenecen a particulares (vecinos, comerciantes...) que han conseguido lo que tienen con esfuerzo. Allí no hay altruismo ni conciencia social ni alegría colectiva. Los que protagonizan la violencia y el vandalismo son egoístas y cobardes cuando además se esconden en sus capuchas. Penosamente ensimismados.
Felizmente, este jueves hubo poco de eso. Ojalá paguen a la sociedad y a los afectados como deben pagar los delincuentes en un estado de derecho.
Lo estimulante y lo positivamente provocador es que la movilización pacífica sí se impuso por sobre la estúpida violencia. Y cuánto poderío tiene la movilización de las multitudes cuando es así.


EL MENSAJE DE LOS MOVILIZADOS


La consigna de la Confech
Dicho eso, otro cuento es el fondo de las aspiraciones en juego.
No parece razonable detenerse ni enredarse en la variedad de consignas y causas sumadas. No vamos a llegar a ninguna parte, por ejemplo, cuestionando o descalificando el movimiento con el argumento de que algunos dirigentes hablan de cosas tan curiosas como la renacionalización del cobre o, más asombroso todavía, ¡asambleas constituyentes!
Otra cosa es poner atención a la médula de lo que estas movilizaciones vienen planteando una y otra vez, porque la situación no da para más.
Todos tenemos claro qué es: educación pública gratuita garantizada para todos los que no puedan pagar enseñanza privada, desde el Estado central y no (en el nivel escolar, por ejemplo) desde municipios de toda calaña bajo un sistema que sólo eterniza los vicios del sistema. En muchos ámbitos hemos probado con éxito institucionalidades colegiadas, respetables, no burdamente politizadas, que bien podrían funcionar organizando, normando y supervisando esa educación pública que debiera terminar con las vergonzosas desigualdades que seguimos tolerando. Y eso no es contradictorio ni excluyente con la alternativa del lucro, legítimo cuando es legal y transparente, pero ilegítimo cuando no lo es.
Lo que parece incomprensible es que los gobiernos de antes y de ahora hayan sido incapaces de responder a ese clamor, al punto que miles y miles de jóvenes tienen que ir a gritárselo a la cara.

6 comentarios:

Daniel dijo...

Es verdad hace años que los politicos hacen oidos sordos de la gente, la clase politica esta pagando su falta de interes en la gente y su simbiosis con los poderes economicos, que dicho sea de paso esta presente en todos los colores.

christian weinborn dijo...

lo otro notable es que si bien es un movimiento politico (algo tan masivo es una accion politica), los partidos estan bastante ajenos: Incluso el pc que tiene dirigentes visibles, no son ellos los que coordinan ni dirigen la protesta. Para que decir la Concertación que aunque ha hecho esfuerzos por ser admitida siempre le recuerdan que son parte del origen del problema.
Eso también genera que sea muy complejo el dialogo y mas aun para el Gobierno el fin de esta movilizacion estudiantil.

Manuel aspe dijo...

Me parece interesante, sin embargo siempre he tenido la duda de si se entrega educación gratis en las Ues estatales claramente deberán llegar los mejores, no me cuadra que aun a las pedagogías entren alumnos con 500 puntos en la psu, osea se entregaría educación gratis a alumnos mediocres, que este ultimo termino no de mal entienda. Se necesitan reformas profundas desde la base, incluyendo mediciones continuas a los profesores que son la raíz del árbol educacional.

Ojalá las manifestaciones sirvan de algo y que de una vez por todas se transparente el tema del lucro que ya parece chiste el que quieran demostrar que este no existe. No tiene nada de malo y debe ser una alternativa para la sociedad y que en un futuro las Ues que obtienen ganancias se conviertan en fundaciones como lo son muchas prestigiosas universidades de países desarrollados.

Que valga la pena y ojalá se sienten a trabajar por que con puras movilizaciones no se avanzara mucho, solo se demostrara el poder de las redes sociales...

Un abrazo

Manuel @maspem

Bruno dijo...

La educación ES todo, si ella no mejora, ninguno de los demas aspectos de la vida mejora ni salud, ni trabajo, ni las igualdades.

Los estados ya no pueden dejar en manos de privados la educacion de su pueblo. Las institutrices hace mucho que dejaron de utilizarse, y la educacion actual pretende eso

Mauricio Hofmann dijo...

Gracias por los comentarios. Algunas reflexiones a partir de ellos:
Daniel y Weinborn!!, sobre el papel y los oídos sordos de los políticos, agregaría que no se hacen un favor ubicándose ahora en la primera fila de las marchas, sosteniendo los lienzos junto a los dirigentes. No son creíbles. Y dañan a esos dirigentes, que aparecen coludidos con ellos. Por ende, terminan dañando el movimiento.
Manuel, estoy de acuerdo: el papel del Estado es asegurar que puedan estudiar todos los que no pueden pagar, pero obviamente si tienen la capacidad de hacerlo. No se puede despilfarrar la plata de todos los chilenos (sobre todo de la que pagan los más pobres con el IVA de cada kilo de pan que compram; siempre hay que recordarlo) en estudios de jóvenes que tendrían un futuro mejor a través de otros caminos.
También concuerdo con Bruno y añadiría algo que todos sabemos: ningún país desarrollado no tuvo y no tiene hoy un sólido sistema de educación pública. Conozco el caso de Japón, donde la educación pública es sinónimo de excelencia, y educación privada es sinónimo de estudiantes "porros" que no lograron entrar o que fueron echados de la educación pública... Los colegios privados son sólo para ellos, o bien (caso distinto, pero muy minoritario) para hijos de gente estrambótica o para hijos de diplomáticos extranjeros).

@vinagrelimon dijo...

Me parece inequívoca tu apreciación frente a los hechos.

Por otra parte, me llama profundamente la atención, que miles y miles de estudiantes logren una capacidad de organización de tal magnitud, sin grandes márgenes de error. Si esta misma actitud se viera reflejada en nuestros senadores y diputados, para lograr fines u objetivos en común, que grato sería todo y, eficiente por cierto. Lo que a la vez, demuestra que el ego personal y el orgullo político, siempre estarán por sobre el bienestar común de la población (en la mayoría de los casos). Digan lo que digan, todos los intentos de los jóvenes estan siendo avalados por grandes y fuertes agumentos, frente a volátiles actitudes de supremacía de los personeros de gobierno. Me gusta que los jóvenes esten ladrando y con respeto, de manera pacífica y también en algunos casos con un altruismo que lo quisiera ver en muchos políticos también.
Cada vez hay menos dimes y diretes y todo está siendo aún más acotado, ya que muchos se informan; frente a ello, no se especula mucho y se puede avanzar mejor.
Eso sí, grátis o no grátis la educación, hay que cambiar la forma en como se educa; la forma en como se les enseña a los futuros profesionales, porque ya son métodos obsoletos (inclusive, mucho se puede aprender en enseñanza media); no solo entregándoles herramientas arcaicas y reventarlos en lecturas de libros de Mktg de décadas pasadas, sino, que se les enseñe a razonar de manera lógica y a vivir. Ya no es necesario tener que estudiar Ingeniería Comercial para ser dueño de una empresa ó un simple innovador..No estamos en una década en la que Si estudiamos Ing. Civil Industrial mi Ph.D. tenga que ser en lo mismo; lo puedo hacer perfectamene en Filosofía y que se complementen..etc.
Saludo cordial para tí Mauricio y los presentes.
Cristián
@vinagrelimon