Muchas afirmaciones se propalan sin base, o fundadas en mitología, de lado y lado. Y así fluctuamos entre un apocalipsis energético dominado por la oscuridad total ("black-out", le llaman) y un "fin de mundo" natural causado por la destrucción total de la Patagonia.
Otro de los absurdos de este par de días ha sido la aparente sorpresa de muchos porque un grupo de "seremis" ha votado como lo ha hecho, presuntamente "amedrentado" por autoridades centrales dominantes al extremo del abuso de poder. ¿De qué estamos hablando, si obviamente los secretarios regionales ministeriales son subalternos de los ministros, nombrados todos por el Presidente de la República, en un régimen político unitario y no federal? ¿Cuándo empezamos a creer que los "seremis" (curiosa palabreja) tenían algún grado de autonomía, si sus jefaturas radican entre sus ministros en Santiago, y sus intendentes a nivel regional? Todos, insistimos, nombrados por el Jefe del Estado.
Esto siempre ha sido así; en un sistema como el chileno es una obviedad, y el que desobedece se va para la casa. Así de simple.
Nunca ha prosperado una reforma que permita la elección de intendentes y algún tipo de gobierno conformado de verdad y únicamente a nivel regional.
En fin... Una forma clásica de mirar el "problema Hidroaysén" es sacando cuentas sobre quiénes ganan y quiénes pierden ante determinados escenarios. En este caso, el de la aprobación por la comisión de evaluación ambiental de Aysén y la probable aprobación del proyecto en las etapas pendientes del proceso.
GANADORES
1. Claramente (y directamente) el proyecto y quienes están detrás de él: Endesa Chile, Endesa España (y detrás de ésta, Enel de Italia) y Colbún (y detrás de ésta, el grupo Matte).
2. Los miles de accionistas directos de esas empresas, las decenas de miles de partícipes de fondos mutuos, y los millones de trabajadores cotizantes en las AFP, que tienen parte de sus ahorros previsionales (más de 3.000 millones de dólares, nada menos) invertidos en esas dos compañías. Estos son ganadores casi directos que nadie menciona. De hecho, nuestros fondos y nuestras pensiones futuras mejoraron un poquito este lunes y martes, gracias al alza que mostraron los precios de las acciones de Endesa y Colbún respectivamente. Hay que decir, eso sí, que esta ganancia puede ser transitoria, ya que cualquier beneficio de esta gigantesca inversión no se verá antes de la próxima década.
3. Los habitantes de la Región de Aysén que esperan conseguir trabajo gracias a las obras de construcción del complejo y (en menor medida) a su funcionamiento posterior, así como los comerciantes y empresarios de diversos rubros que proyectan un mejoramiento de sus negocios regionales y locales, gracias a lo que se espera que sea un inédito crecimiento en la economía regional, con un flujo de visitantes nunca antes visto, y un consumo de todo tipo de bienes y servicios de la zona que se vería especialmente incrementado durante los años que durarían las obras.
4. Las familias y empresas de Coyhaique, Puerto Aysén, Puerto Chacabuco, Chile Chico, Cochrane, Puerto Guadal, etc., así como de las zonas rurales de la región, que podrían ver reducirse a la mitad sus cuentas de luz, si se confirma una de las nuevas condiciones que la Comisión de Evaluación Ambiental impuso esta semana al proyecto.
5. Los sectores económicos, industrias, empresas y profesionales de todo tipo del resto del país, que podríamos denominar "proveedores", apuestan al desarrollo de un gran proyecto de construcción en Aysén, y a la posibilidad de proveer materiales, equipos, obras y servicios necesarios para esa construcción.
6. Los sectores políticos que pueden verse favorecidos con, precisamente, los efectos políticos del proceso. Estos pueden ser el aumento de su popularidad y la subsecuente conquista de adhesiones (y de votos, eventualmente); o bien, la pérdida de popularidad-adhesiones-votos de sus adversarios políticos. Otra vez, más allá de la justicia y legitimidad de las motivaciones de unos y otros.
7. Los activistas individuales u organizados que seguirán obteniendo financiamiento para mantener sus actividades de oposición al proyecto. Más allá de la justicia de sus causas, hay legiones de militantes desinteresados, pero también numerosos profesionales legítimamente pagados, que viven de esta actividad. La sobrevivencia de esas mismas causas es su propia sobrevivencia.
8. Los gestores y financistas de otros proyectos de generación de energía en desarrollo en la actualidad o en el corto plazo, especialmente de origen térmico, que durante un tiempo seguirán desarrollando sus iniciativas sin mayor atención pública, gracias a que la mayor parte de ella estará concentrada en Hidroaysén.
9. Los habitantes de otras regiones del país, donde no se construirán o al menos se postergarán otros proyectos de generación eléctrica, del tipo que sean. Particularmente favorecidos podrían ser los habitantes del norte, donde se ha concentrado la construcción de centrales a carbón y diesel... si es que avanza la unión de los sistemas interconectados del norte grande y central.
10. Los habitantes de las áreas (o de sus vecindades) que Hidroaysén se está comprometiendo a mejorar mediante nueva infraestructura y mejor conectividad, así como a través de la reforestación y conservación de la naturaleza.
11. La población general, independientemente de que apoye o rechace el proyecto, y que en los años futuros alejaría el fantasma del desabastecimiento energético, así como podría beneficiarse de tarifas eléctricas más bajas... o al menos no tan altas como las que habría si no seguimos incrementando nuestro parque generador al menos para sostener el crecimiento económico que (se supone, aunque ahora lo dudamos) todos queremos.
PERDEDORES
1. Los habitantes naturales y predominantes en las áreas que serían afectadas por el megacomplejo hidroeléctrico: flora y fauna de las cuencas de los ríos Baker y Pascua. Cualesquiera sean las mitigaciones y compensaciones, debemos reconocer que habrá naturaleza dañada.
2. Los empresarios y trabajadores que operan, así como los habitantes que viven, en aquellos puntos turísticos que serían afectados negativamente por las centrales y, en el futuro (y quizás más grave) por las líneas de transmisión. Si su negocio es la naturaleza y el paisaje, obviamente verán deteriorarse y desvalorizarse su capital.
3. Los auténticos defensores y amantes de la naturaleza, entre los cuales hay distintos grados de militancia e incluso de fanatismo. Todos ellos, en la medida que actúan con honestidad y hasta de candidez, perderán siempre que haya obras de desarrollo económico en la medida que prioricen los cuidados del medio ambiente por sobre ese crecimiento.
4. Los grupos económicos, empresarios y financistas que están detrás de otro tipo de complejos generadores de energía proyectados o proyectables hacia el futuro, como las termoeléctricas... pero también las generadoras de energía de carácter renovable no convencional, como las eólicas y las solares. Obviamente, si un gigante hidroeléctrico es capaz de abastecer una cuota significativa de la demanda, la porción restante de una torta muy apetitosa se les reduce.
5. Los turistas, pescadores con mosca y visitantes en general que cada año recorren la Patagonia y que, en un futuro no lejano, verán cómo una de las zonas más inexploradas del mundo es invadida en algunos lugares por represas y enormes tendidos eléctricos. Con dolor hay que reconocer que este grupo de perdedores es eminentemente extranjero, porque la casi totalidad de los chilenos no conoce esta zona. Miles de los que protestan por estos días apenas imaginan (si es que...) la belleza de nuestro sur. Y cada verano es penoso comprobar lo pocos que son los visitantes chilenos en comparación con los extranjeros que vienen a deslumbrarse con lo que tenemos. Y esto corre para nuestro desierto, para Torres del Paine y para Rapa Nui.
6. El gobierno en su dimensión política, en la medida que efectivamente una mayoría de los ciudadanos se oponga al proyecto. Hasta ahora parece ser así, y la administración Piñera arriesga pagar un alto costo en popularidad si persiste en su respaldo abierto a Hidroaysén. Lamentablemente para el gobierno, es mucho más fácil sufrir este daño que capitalizar el beneficio de no tener que responder por la falta de energía. Por lo demás, toda la información reciente sugiere que ese escenario crítico se ha alejado, de manera que ni siquiera es un factor relevante para la popularidad del gobierno actual... a diferencia de la pérdida de aprobación popular, que probablemente se notará en la próxima encuesta.
(Ya resultó elocuente la encuesta Ipsos de abril, como se aprecia en el cuadro siguiente).
Nota: Estas dos nóminas no son equivalentes ni biunívocas ni restringidas; ni siquiera son completamente excluyentes, porque según el cristal con que se mire el tema, y dependiendo del curso de los acontecimientos, las victorias pueden confundirse con las derrotas.
Enumeramos más categorías de ganadores que de perdedores, pero eso no es sinónimo de que los primeros sean más que los segundos. Nada que ver. Son sólo categorías, y dan cuenta de grupos distintos, a veces superpuestos, y de tamaño diverso (o más bien desconocido).
El propósito es doble: usar un cristal algo burdo pero a veces ilustrativo para mirar un tema complejo y comprobar hasta qué punto lo es... y acercarse a comprender por qué unos y otros (y otros más) reaccionan como lo hacen frente a las noticias más recientes sobre Hidroaysén.
Por último, no es malo el humor en cualquier tema:
...Después de este video, ¡habría que agregar a Hitler a la lista de perdedores!
12 comentarios:
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@mauriciohofmann es muy simple esa ecuación: ganan los mismos de siempre. Ergo: pierden los mismos de siempre.
@dcastilloseda
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@mauriciohofmann Muy general
@CARLOSMAULINO
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@mauriciohofmann excelente apreciación
@Syl_Miranda
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@mauriciohofmann los empresarios y pierden los hijos del futuro
@ubillafran
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@mauriciohofmann Recuerda cuando la Concertación sí apoyaba a HidroAysén http://bit.ly/mUkaB0
@WSContreras
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@mauriciohofmann excelente Posteo en su blog. La mirada sin fanatismo alguno. Eso se agradece
@xabideney
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@mauriciohofmann claramente perdemos los humanos!! tierras hermosas, paisajes, flora y fauna!! por plata!
@lasgalena
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@mauriciohofmann. Gana Chile en todo sentido. Digamos las cosas como son
@JorgeCornejoB
La población necesita más información para poder saber quiénes ganan y quiénes pierden
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@mauriciohofmann estimado, en su análisis omitió lo más importante: el tendido eléctrico, lo que cambia radicalmente su escenario propuesto.
@pvialv
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Notable columna de Mauricio Hofmann "@mauriciohofmann: Invitación al debate sobre Hidroaysén: http://bit.ly/hoCHQN
@corellat
Muchas gracias por todos los comentarios! Sobre la observación de que omití "lo más importante", como sería el tendido de las líneas de transmisión, de acuerdo en parte: Lo omití, pero porque hasta ahora no hay proyecto. El post se refiere sólo al complejo de centrales llamado "HidroAysén".
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